El acero está presente en casi todo lo que nos rodea, desde los tornillos que sujetan la mesa en la que trabajamos, pasando por la tostadora en la que nos preparamos las tostadas del desayuno o el coche o el tren o la bicicleta que nos lleva a trabajar hasta los aviones o barcos que transportan nuestras mercancías o los carros de combate que usan los ejércitos en los conflictos bélicos.
Última modificación: 28 octubre 2023
En un post anterior abordamos algunos de los retos de futuro del acero en la industria. Este futuro nos afecta porque el acero juega un papel esencial en el desarrollo de la sociedad humana: ha permitido el desarrollo de ciudades con la construcción de estructuras más grandes y complejas, como rascacielos, puentes y otras grandes estructuras que antes no eran posibles, ha hecho posible la expansión del comercio y el intercambio de personas en todo el mundo gracias las infraestructuras de transporte, al usarse en la fabricación de automóviles, trenes y aviones, así como en el desarrollo de carreteras, vías férreas y aeropuertos, en la producción de barcos y otras embarcaciones, y también ha mejorado el dia a día de las personas gracias a su presencia en maquinaria industrial que a su vez fabrica útiles como electrodomésticos, productos electrónicos y otros artículos para el hogar.
Sabiendo todo esto, nos preguntábamos cómo afecta el futuro del acero en las industrias que dependen de él, de las que, a su vez, dependemos las personas hoy en día. Por eso en este post hablaremos de estas industrias.
Las industrias dependientes del acero generalmente involucran la producción del mismo acero, su procesamiento en bienes y la venta de esos bienes. Las actividades comunes incluyen la producción de productos de acero como barras, placas y láminas, la fabricación de esos productos en componentes y la venta de esos componentes en forma de productos terminados. Las industrias que dependen del acero suelen estar asociadas con otras industrias, como la automotriz, la construcción y la fabricación industrial, las cuales constituyen una parte importante de la industria siderúrgica mundial.
La industria automotriz depende enormemente del acero, ya que se trata del material más comúnmente utilizado. Se usa en la fabricación de carrocerías, chasis, marcos, partes de motor y otros componentes, fundamentalmente porque es un material fuerte, duradero y relativamente económico. Además, el acero tiene la capacidad de adoptar formas complejas y es muy resistente a la corrosión, lo que lo convierte en un material ideal para piezas de automóviles.
El acero es uno de los materiales más duraderos y fiables utilizados en la industria energética, ya que es fuerte, ligero y resistente a la corrosión. Se utiliza para construir infraestructura energética como tuberías, torres y tanques de almacenamiento, así como para fabricar componentes para turbinas eólicas y paneles solares. Además, también se utiliza en proyectos como plataformas de perforación, plataformas petrolíferas y reactores nucleares. El acero es, por lo tanto, un material esencial para la industria energética debido a su resistencia, durabilidad y disponibilidad.
Por otro lado, el acero es un componente importante de la infraestructura de energía renovable, como la solar, la eólica o la hidroeléctrica. Este metal se destina a la construcción de los perfiles de los paneles solares y las turbinas eólicas, y también se usa para erigir torres y otras estructuras que se usan para soportarlas. El acero también es una de las materias primas que intervienen en la fabricación de células solares y paneles fotovoltaicos. Los aerogeneradores también dependen de la disponibilidad de acero, ya que éste se encuentra en sus palas, así como los cimientos y otras estructuras de soporte, y las turbinas hidroeléctricas y las tuberías también contienen acero. Además, la energía almacenada también requiere acero para la construcción de baterías o baterías de volante que la acumulan.
La industria de la construcción depende del acero para proporcionar la estructura y el equipamiento necesarios para construir edificios y otros proyectos de infraestructura. Es el mayor consumidor individual de acero en el mundo, dado que usa acero para casi todo, desde grandes rascacielos o puentes, con sus estructuras, postes de soporte, vigas, barandillas y techos, hasta diminutos clavos, tornillos o pernos, y otros elementos de sujeción que se usan para mantenerlos unidos. La carpintería como puertas, ventanas y escaleras también usa extensivamente el acero, y no podemos olvidarnos de la fabricación de aparatos de aire acondicionado, calentadores de agua y otros sistemas de climatización. En definitiva, la industria de la construcción depende del acero para proporcionar la estructura y el equipamiento necesarios para construir edificios y otros proyectos de infraestructura.
El acero se utiliza en la fabricación de todo tipo de maquinaria pesada, desde excavadoras y grúas hasta tractores y camiones. Los fabricantes de maquinaria pesada utilizan este metal para hacer las estructuras de los vehículos, así como para la fabricación de los motores, ejes, transmisiones, partes de frenos y otros componentes. También se utiliza para reforzar la estructura, para aumentar la resistencia a la corrosión y para mejorar la durabilidad de los vehículos.
Un ejemplo del uso del acero en una máquina pesada es la construcción del chasis de una excavadora. El chasis de acero proporciona una base fuerte y duradera para la máquina y es capaz de soportar las cargas pesadas y las tensiones que se ejercen sobre la máquina durante el funcionamiento.
Durante la Revolución Industrial, el acero fue uno de los principales impulsores del crecimiento de la producción de bienes de consumo. Fue en este momento en el que el acero comenzó a utilizarse para fabricar la primera máquina de vapor, un invento crucial que permitió a la humanidad tener una fuente de energía mucho más eficiente y confiable. Esto condujo a la creación de la industria ferroviaria, la cual se convirtió en el medio de transporte más importante en la era moderna.
El acero también fue una parte clave en el desarrollo de la industria náutica y aeroespacial. Debido a sus propiedades resistentes al óxido, al calor y a la presión, el acero fue el material ideal para fabricar los barcos, aviones y cohetes que han permitido al ser humano surcar los cielos y los mares, tanto con fines comerciales como militares. Esta resistente y duradera materia prima ha permitido a los constructores construir barcos y aviones de mayor tamaño, con mayor seguridad y resistencia para soportar los rigores del mar y del aire.
El acero es un material esencial en la industria manufacturera, ya que se utiliza para fabricar una variedad de productos, desde automóviles y aviones hasta electrodomésticos y productos electrónicos. También se utiliza en la producción de herramientas y maquinaria. Podemos encontrarlo en ollas y sartenes, cuchillos y tenedores, pequeños electrodomésticos como licuadoras, tostadoras o cafeteras, grandes electrodomésticos como lavaplatos o lavadoras, mesas y sillas, bicicletas y scooters y una infinidad de otros productos de uso diario. Al ser un metal fuerte y resistente, el acero es ideal en estos casos, y al ser también resistente a la corrosión, tener un alto punto de fusión y ser relativamente económico, suele ser el material preferido cuando se trata de fabricar artículos que se usarán con frecuencia y deben resistir el desgaste.
Como hemos visto, en la actualidad, el acero es uno de los materiales más usados en diversas industrias, debido a sus excelentes características mecánicas, alta resistencia a la corrosión y bajo coste de producción. Sin embargo, tiene algunas desventajas, como su alto contenido de carbono y su alta demanda energética para su producción. Esto ha llevado a muchas industrias a buscar alternativas que sean más económicas, sostenibles y menos dependientes del acero. En el post anterior que citábamos al inicio ya tratamos algunos aspectos del futuro del acero, incluyendo aspectos como los desafíos medioambientales, de manera que en este apartado nos centraremos en algunas de las alternativas del acero en la industria.
Es una de las principales alternativas al acero en la industria, especialmente en la automoción, al ser ligero, duradero y resistente a la corrosión. También se utiliza en estructuras como puentes, edificios y otras estructuras donde se desea un peso más ligero y propiedades no corrosivas. Su excelente conductividad térmica y eléctrica lo hace una buena opción para aplicaciones en la industria energética 0que requieren transferencia de calor o electricidad, entre otros.
El titanio es un metal increíblemente fuerte y liviano que se usa en la industria automotriz por su resistencia y durabilidad. A menudo se usa como una alternativa al acero para piezas como escapes y componentes de suspensión. En la industria de la energía es apreciado por su resistencia a la corrosión y su alta relación resistencia-peso. Además, se utiliza en puentes, edificios y otras estructuras donde la resistencia y el peso son importantes.
El magnesio se usa para componentes estructurales como chasis, suspensión y componentes de transmisión en automoción, así como en componentes estructurales de edificios e infraestructuras y como aleación en acero. Además, el magnesio tiene una de las proporciones más altas de resistencia a peso de cualquier metal, lo que lo convierte en una opción ideal para aplicaciones que requieren resistencia pero deben permanecer livianas en la industria energética.
El cobre es un metal fuerte y resistente a la corrosión que a menudo se usa para el cableado eléctrico y otros componentes eléctricos en los automóviles, al ser también buen conductor eléctrico y térmico. Por este mismo motivo, también se usa en la industria energética y en construcción en intercambiadores de calor y cableado, en techos y en revestimientos, entre otros.
El acero es un material increíblemente versátil y se utiliza en una amplia variedad de industrias, desde la construcción hasta la automoción. Su resistencia, durabilidad y rentabilidad lo convierten en una opción atractiva para muchas aplicaciones diferentes. Con el desarrollo de nuevas tecnologías, el acero sigue siendo un material fiable para uso industrial y es probable que lo siga siendo durante muchos años.
Sin embargo, la producción de acero es uno de los principales contribuyentes a las emisiones globales de gases de efecto invernadero, y con la creciente necesidad de cumplir con los objetivos de sostenibilidad, existe una necesidad creciente de encontrar formas de producir acero de manera más eficiente, al tiempo que se reduce su impacto ambiental. El uso de procesos de fabricación de acero más limpios y materiales avanzados puede ayudar a reducir el impacto ambiental general de la producción de acero, al tiempo que garantiza que el acero siga siendo un componente importante y sostenible del panorama industrial mundial.
Foto de Igor Starkov: https://www.pexels.com/ca-es/foto/edifici-construccio-industria-patro-1117452/